Pasála


A Wonder Woman le pasó esto .

Todavía (o cada vez más) hay gente que juega con lo más valioso que tenemos.
Gracias a Dios fue sólo la típica jugada de los presos que llaman por teléfono fingiendo un secuestro.
Por suerte, WW llamó rápidamente a su casa y comprobó que su familiar estaba allí.
Y el susto?, y el ataque de terror?: lo tuvo, por supuesto.
Y si atiende una persona con problemas cardíacos?, y si (como le pasó a una conocida) la supuesta víctima del rapto no se puede localizar?
Y si el secuestro es real??

Seguimos siendo las víctimas cotidianas.
Estadísticas en planillas.
Notas cada vez más pequeñas en los diarios.
A nadie parece importarle.

Y de todo esto se desprenden, inevitablemente, espantosas conclusiones:

Importan más los DDHH de los delincuentes que los nuestros. (Entran hoy, salen mañana o siguen cometiendo actos delictivos desde adentro)

Los presos tienen celular. (A ver señores... hay que rever algunas cosas)

Ya hemos aprendido a cerrarle la puerta en las narices a la gente, a alejarnos de los que, en la calle, intentan preguntarnos algo, a subir en el ascensor con un desconocido rezando para que no nos robe (en el mejor de los casos) y a proteger la cartera como si en ella lleváramos un órgano para transplante.

Por lo tanto es mejor ser solidario y DIFUNDIR. Porque los que deberían estar cuidándonos, están en Punta del Este pergeñando el próximo atraco.

Puede ser tu madre, hijos, hermana o marido. Podés ser vos.

Y no... no es divertido, ni cool, ni fashion. Preguntále a WW